Me da pena que en fechas especiales mucha
gente no sea capaz de dejar ciertos problemas a un lado. No quiero especificar,
pues creo que no es conveniente ni necesario, pero ver y oír ciertas cosas
provocan, por así decirlo, rechazo. Arrastrar cualquier odio infundado a todo
lo que nos rodea no solo nos hace daño y alimenta un sentimiento insano, sino
que es palpable para cualquier niño que lo vea. Los niños tienden a seguir el
ejemplo que han oído, pensando que si viene de sus mayores es cierto. Es más, ni
siquiera lo piensan así porque no lo necesitan, es algo que hacen y creen de
manera natural sin reflexionar. Todos estos niños crecerán y creerán algo que,
a mi parecer, es completamente falso. Y el futuro está mayoritariamente en
sus manos. Puede que se les esté abocando a seguir cometiendo los mismos
errores que en el pasado.
La tendencia a verlo todo positiva o
negativamente es frecuente. El mágico punto intermedio se pierde. Nos hacen
creer en cosas inciertas, empezar a crear odio, sentirnos mejor que nadie... Y,
¿saben qué creo yo? Que nos están manipulando una panda de "personas"
con traje y corbata, y pongo comillas porque a veces dudo de que puedan
llamarse así. Y todas esas per... todos esos entes, vestidos con trajes a
simple vista impolutos, están en todas partes.
Había empezado a escribir pensando en
cierto sector, pero lo del traje y corbata y el hecho de que estén en todas
partes me hacen pensar en otro. Hay muchas suposiciones pero no me cabe ninguna
duda que esta gente dirige más que un simple sector de la sociedad. Por
ejemplo, un economista controla "solamente" la economía, pero no
olvidemos que el dinero hoy en día lo mueve todo. Un juego estratégico nos
puede llevar a la quiebra mundial mientras ellos amasan grandes cantidades de
dinero viendo como su fortuna crece y otros se hunden en la miseria.
En definitiva, dicen un hombre es un
animal racional. Cada vez entiendo más lo de animal, pero cada vez menos
lo de racional.
S
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